Nuevo "ranking" de agrupaciones en función de las reacciones del público:
a) Agrupaciones muy malas:
Se les despedirá con una fuerte y cerrada ovación.
b) Agrupaciones malas:
Fuerte y cerrada ovación acompañada de un sector de público (familiares) en pie.
c) Agrupaciones mediocres:
Fuerte y persistente ovación hasta que cae el telón, con palmas acompasadas y sector del público (familiares) en pie.
d) Agrupaciones buenas:
Fuerte y persistente ovación hasta que cae el telón, con palmas acompasadas y el teatro en pie.
e) Agrupaciones muy buenas:
Fuerte y persistente ovación hasta que los integrantes de la agrupación deciden retrasar la posición en el escenario mientras devuelven emocionados los aplausos y los besos al público. Teatro completamente en pie al grito de "Chirigota, chirigota!!" o similares...
f) Agrupaciones "de final":
Teatro completamente en pie al grito de "Chirigota, chirigota!!" tras la interpretación de cada uno de los bloques del repertorio. Se despedirá con una fuerte y persistente ovación hasta que los integrantes de la agrupación deciden retrasar la posición en el escenario mientras devuelven emocionados aplausos y besos al público. Se llevan sus manos al corazón y señalan con los respectivos dedos índice al público. Lágrimas emocionadas sobre las tablas... habrá que pasar una fregona.
g) "Pelotazos":
¿?
¿Nos hemos vuelto locos...?
Dentro de nada pasará como en la música clásica. Saldrán varias veces a saludar, el autor también se dará su baño de aplausos en el escenario y habrá una azafata que dará un ramo de flores al director de la agrupación. Tiempo al tiempo...
ResponderEliminarYo tengo una teoría. Creo que eso pasa porque cada vez pisa el teatro más gente de fuera de Cádiz. El que viene, y sobre todo el que lo pisa por primera vez, lo vive de una forma distinta, más emoción, el ambiente, etc, y muestran esa emoción aplaudiendo todo.
ResponderEliminar"Un poné", si a mi me llevaran al Bernabeu (nunca he estado) seguro que estaría apludiendo hasta en el descanso.
Otra cosa son los familiares pesados.
No digo que me parezca ni bien ni mal, solo es una teoría. ¿Mesentiende?
Es muy probable que así sea, Romancerobis. De cualquier forma cuando todo el teatro se pone en pie, imagino que no todos serán de fuera... y eso ocurre dos o tres veces por noche.
ResponderEliminarCon lo bonito que sería despedir a las malas de rabiar con un elocuente silencio... y levantarse de los asientos para ovacionar sólo a quién se lo merezca.
No sé si somos demasiado sensibleros con el esfuerzo (a veces nulo) de algunas agrupaciones o, simplemente, que la gente a pesar de lo que presume, no tiene ni puta idea de carnaval. Van a ser ambas cosas...
En el Falla siempre se aplaudió todo, ya lo demostró el Selu en el 97 con las cagarrutas con un pasodoble a favor de Aznar y el siguiente en contra y todo el mundo aplaudiendo a saco los dos...
ResponderEliminarAmbos eran grandes pasodobles... y diseñados con ese objeto, ¿cómo no aplaudir algo así?. Por otra parte, tampoco recuerdo que en aquella ocasión la gente se levantase de sus asientos a gritar ¡Chirigota!.
ResponderEliminarNo es eso lo que estoy intentando tratar aquí.
Aquí lo que planteo es lo sano que sería para el concurso que el público fuese consecuente con la calidad real de la agrupación. Eso de "vamos a aplaudirles a los chavales para que se vuelvan contentos a Tordesillas de la Sordera (o a su barrio de Loreto, igual me da)", es un error, y claro, para evitar agravios comparativos con las buenas agrupaciones, están obligados a formar una pelotera cada vez que se le da algo con un mínimo de calidad. Es ridículo. A mí me avergüenza. Y no todos son familiares.
Y ahora es complicado salir de esta rutina, porque los seguidores de cada agrupación que van al teatro no permitirán que sus agrupaciiones reciban un trato más discreto que los adversarios, y apuesto a que intentarán empezar a interrumpir el repertorio cada vez antes. Llegaremos a que se empiece a ovacionar antes de abrir el telón. ¿Se dejará influir el jurado por esta mierda...?. Seguro.
Totalmente de acuerdo. Aunque ponerse de pie, volverse a sentar y ponerse de pie otra vez es un ejercicio muy recomendado por los dietistas... será por eso???
ResponderEliminarTienes razón... Eso me recuerda a una canción de Teresa Rabal: "Me pongo de pie, me vuelvo a sentar, porque a los oficios vamos a jugar"...
ResponderEliminarPublico consecuente jejeje... Ni yo! Lo del Selu, muchos de los que aplaudieron el segundo pasodoble ni se dieron cuenta de la intención hasta que terminaron de aplaudir. Tanto aplauso, digamos, fácil, ayuda al final a que cualquier actuación pueda acabar con ovación. Claro que si la ovación la provocan 4 amigotes, pues si, cualquier día cuando anuncia Bablé a la agrupación, todo el mundo ovacionando 20 min del tiri y pasamos de escuchar, nos olvidamos del COAC y empezamos el COASS (Concurso Oficial de Aplausos Sin Sentido)
ResponderEliminarA lo que me refería, Enrique, es que lo normal es que el público no aplauda el CONTENIDO del pasodoble, sino a lo bien argumentado, escrito y cantada que esté la letra.
ResponderEliminarSi se aplaudiesen contenidos, no tendría mucho sentido tanta unanimidad al ovacionar letras contra Teófila (con mayoría absoluta desde hace no se cuántos años); contra la iglesia (con la de capillitas que hay en Semana Santa); contra la monarquía (y cuando nos visitan los Reyes el público abarrota las calles con demostraciones de cariño)...
En otras palabras, habría que pensar que el COAC es el concurso de la falsedad, la hipocresía y la incoherencia desde todos los ámbitos: autoría, intérpretes y público. Cómo si no se explica que entre una muestra de 150 autores, todos, to-dos, sean:
- De izquierdas
- Ateos
- Republicanos
- Solidarios hasta la pedantería más vomitiva
- Miembros honorarios del Greenpeace
Y eso merecería un estudio estadístico, porque la realidad parece ir por otros derroteros.
No habría chuflas en Cádi...
Pues si... El COAC es lo que es...
ResponderEliminar