El Final del Popurrí

Desde cuando y por qué parece que es obligatorio para las chirigotas y cuartetos terminar el popurrí con un piropo cursi a Cádiz. Todos giran sobre lo mismo: aplicar la temática del tipo a Cádiz y su carnaval a modo de piropo sin ninguna pretensión chovinista pelotera o demagógica, ¡qué va!
Que voy de marinero...tú eres mi barquilla que se mece en las olas de serpentinas de tu carnaval. Que voy de Pierrot... tú eres mi Colombina que inspira la Comedia del Arte de tu carnaval. Que voy de bollycao... tú eres la crema que endulza mi vida con más leche y menos cacao. Que voy de Escherichia Coli... tú eres el intestino grueso de mis sueños donde vivir eternamente alimentándome de la mierda de tu carnaval.
Absolutamente deprimente la cuarteta y más aún la reacción del público que salta como un tertuliano de telecinco en el recurrente in crescendo de la susodicha cuarteta. Qué hartazgo.
Ya sé que las comparsas también tienen lo suyo desde que Quiñones dedicara en Robots ese piropazo a Cádiz en el final de la presentación: "tú ereeeeees mior-de-na-doooor". Los bellos de punta. Pero éste es parte de su papel y me lo puedo esperar. Pero me niego a acostumbrarme a esos ridículos finales de popurrí en las agrupaciones que tienen como principal objetivo hacer reir. Cuánto poeta reprimido y cuanta metáNfora barata encierran esos finales.

Bueno Cádiz, ya me retiro,
ya mi crítica se apaga en tu escritorio,
mi letra Arial se difumina en tus entradas,
con el consuelo que me queda
de disfrutar la vista previa
del blog de risas que se llama Carnavaaaaaal.
En tí publico con el alma
puesto en cada comentario,
sin tí no sé dónde estará el botón guardar;
Mi Cuenta lleva una careta
que es alma de un usuario
sin contraseña para que puedas entraaaar.
Para que siempre, mi Cádiz, puedas entraaaaaar.